sábado, 25 de abril de 2015

El rol silente del diafragma en la estabilidad intrínseca del core*


Aliento de vida. 
El Osteópata Albert Rosa Sempere afirma que  el diafragma “(…)  Es el motor respiratorio, el obrero subordinado que ordena y adecúa los ritmos vegetativos a los diferentes estados fisiológicos. El miedo, la angustia, la alegría, la serenidad, la indecisión, el estrés, son emociones y estados nerviosos que recurren mediante el sistema nervioso autónomo a este músculo para adaptarse a los patrones homeostáticos”.
Nuestro enfoque derivado de la perspectiva de educadores y readaptadores del movimiento, entendiendo al sujeto como un ser biopsicosocial y no meramente como portador de un cuerpo, siguiendo la línea de la educación e higiene corporal, se encuentra con la tarea de analizar - reorganizar estas estructuras del aparato locomotor y devolver al sujeto a su cotidianeidad, readaptando sus hábitos de movimiento que han sido alteradas.

¿Diafragma?
El diafragma se inserta en el reborde costal por delante y por los laterales y en las vértebras dorsales y lumbares por detrás.

  • En la 7ª-8ª-9ª costillas se ancla en el cartílago que une estas costillas con el esternón (articulación condrocostal) y en este punto se fusiona con otro músculo muy importante: el transverso del abdomen.
  • El derecho es más largo y llega hasta L3 (la tercera vértebra lumbar) y en cambio el izquierdo llega hasta L2.
  • Por detrás se inserta más bajo que por delante, formando los Pilares del Diafragma.
  • Desde estas inserciones periféricas, las fibras musculares convergen en el centro: El centro frénico.

 ¿Sabemos qué misión tiene el Diafragma en el cuerpo? Como ya hemos dicho, el diafragma es el músculo de la respiración, pero ni este es el único músculo que nos ayuda a respirar, ni la respiración es la única función que tiene el diafragma.

Activación del sistema de estabilización intrínseco
El diafragma es considerado un estabilizador local fundamental, en lo que Panjabi (1992), define como subsistema activo muscular. Sus características de soporte y acción anticipatoria lo posicionan como un componente fundamental para la estabilización del eje lumbopélvico.
Entramos aquí en un punto importante, el diafragma debe bajar lo suficiente para que el aire pueda entrar en los pulmones, pero no tanto como para “dañar” las vísceras abdominales. Sale aquí a escena el músculo Trasverso del Abdomen, que es el jefe del diafragma, básicamente le dice hasta donde tiene que bajar y si debe subir más.
Durante la inspiración, el transverso del abdomen, actúa defendiéndonos de la gran fuerza del diafragma, le ofrece resistencia y por otro lado dirige las presiones hacia abajo y hacia atrás donde el “suelo” (el suelo pélvico) es más fuerte.
Durante la espiración forzada, esa que hacemos cuando realizamos ejercicio o cuando alguien nos pide que soplemos, la pared lateral, se contrae ejerciendo de faja y empuja al diafragma hacia arriba. Lo que nos ayudará a expulsar más aire, no solo sube el diafragma, sino que el suelo pélvico baja, es por ello que existe una activación automática de la musculatura del suelo pélvico durante la contracción del trasverso.
Siendo más explicito “la maniobra de exhalación activa oblicuos, transveso, recto, la presión intraabdominal actúa estabilizando la columna vertebral”. La exhalación aumenta el aporte de estabilidad, y si a ello anticipamos la inhalación con la activación diafragmática, aumentamos el potencial de los oblicuos y recto del abdomen para estabilizar el eje lumbopélvico.

Rescatemos la extrema importancia de la correcta educación del sistema estabilizador intrínseca o profundo del eje lumbopélvico. Cuando la activación profunda es adecuada, la calidad de la activación extrínseca es mayor. La protección de las estructuras centrales contribuye a la mejor transferencia de fuerzas entre trenes. Es por ello que aunque resulte aburrido, insistir con la activación conjunta del suelo pélvico y transverso como facilitadora de la activación de los multifidos es importantísimo para el funcionamiento de los mecanismos retroalimentarios.
La estabilidad del eje lumbopélvico y la efectividad para transferir fuerza depende de la activación secuencial de patrones en la musculatura estabilizadora intrínseca. Nuestro objetivo es crear y modificar patrones de engramacion tal que la activación estabilizadora del eje lumbopélvico preceda a las solicitudes propulsoras de los miembros superiores e inferiores y que dichos patrones sean transferibles a las actividades de la vida diaria o al deporte. 


*aporte de los Profesores Leandro Fernández y Vicente Figus. Ambos conforman el grupo de trabajo RREM. 


BIBLIOGRAFÍA DE REFERENCIA: 
DI SANTO, M.  Estabilidad lumbo-pélvica. Core Stability Training. Biblioteca virtual IPEF Córdoba.
PANJABI, M. The Stabilizing System of the Spine. Part I. Function, Dysfunction, Adaptation, and Enhancement. Journal of Spinal Disorders. Vol. 5, No. 4, pp 383-389. 1992.
------------------ The Stabilizing System of the Spine. Part II. Neutral Zone and Instability Hypothesis. Journal of Spinal Disorders. Vol. 5, No. 4, pp 390-397. 1992.